Una especie de fiebre por el piloto Manén Méndez y su equipo (Manén-manía) se está apoderando cada vez más del ambiente automovilístico local.
Dos éxitos en igual número de salidas este año han comenzado a convencer a los incrédulos, quienes le restaban mérito a los triunfos de Manén, al considerar que el piloto Shell-Banreservas era poco agresivo y convincente. Para quienes así pensaban ahí les va esto: Manén ha cambiado el lema de "paciente y agresivo" por el de "constante". Quiere decir esto que el nuevo Manén Méndez, apoyado en el excelente trabajo de su equipo mecánico y en la adquisición de un motor más grande para su Chevy Camaro, en cada competencia saldrá dispuesto a liderarlo todo, hasta quedarse con la bandera a cuadros y el podio.
Un indicio de lo que podría lograr Manén con su nuevo estilo y estrategia de carrera quedó evidenciado durante la segunda prueba puntuable del Campeonato Nacional de Automovilismo. Es cierto que no pudo conquistar la posición de largada del evento.
Sólo esto le faltó para cumplir con la promesa de liderarlo todo que hizo previo a la competencia, pero no hay dudas de que fue el piloto más dominante en el asfalto y nueva vez ofreció cátedras de manejo y concentración, lo que le reportó su segunda victoria al hilo en la categoría GTS.
"Qué problema para los otros equipos, ahora Manén está ganando también cuando sale delante", dijo un emocionado aficionado luego del convincente triunfo conseguido por el campeón defensor el pasado domingo día 5 de mayo en la duela del Autódromo Las Américas.En esa ocasión, luego de liderar con relativa facilidad el pelotón durante la primera manga, en el segundo heat, logró sobrevivir a un festival de colisiones, hasta convertirse en el piloto más destacado de la jornada.
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